Respetar y el saber estar. Es mi lema para vivir de frente la vida. Amo a los animales por encima de muchos humanos. Casi siempre me dejo guiar por el corazón, aunque me lleve muchos disgustos, pero no me importa, prefiero ofrecer amor incondicional, que pasar por la vida sin ofrecer nada. Soy amiga de mis amigos y los defiendo con la mejor arma que tengo, la sinceridad y verdad. Aun no siendo rencorosa y perdonar con facilidad, aparto sin temblarme el pulso, a las personas toxicas y que traicionan mi amistad. Si no te gusta mi manera de pensar, si no eres defensora/ or de los animales; no me interesas ni como humano, ni como amigo. Te agradecería que me borraras de tus amigos y salieras de esta página.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Cadenas














El tiempo
se nos escapa de las manos


con premeditación
y alevosía.


Nada se
puede hacer aun queriendo


y se nos
apaga este amor que sin apenas


nacido, se
pone punto y final a este capitulo


con un
final incierto.





¿Donde
se quedaron los deseos?


¿Dónde se
fueron los anhelos?


¿Por qué
tu duda incierta, te corroe


y devora
lentamente tu alma?





Las
fuerzas me abandonan y no encuentro una


explicación
para tus dudas, y poco a poco


de tu lado
me apartan.





De ti
depende vida mía, que este capitulo


que nos
abraza a una nueva vida,


tenga continuación
o por el contrario,


un final
incierto.





Hay
muchas cadenas simbólicas que me atan, tu mejor
que nadie me conoce  y sabes
perfectamente, que ni todas las cadenas existentes, podrían
atar mi espíritu libre, mucho menos mi alma.




Poema inédito de Ana Giner.

sábado, 11 de diciembre de 2010

Beber
















Beber a sorbos quisiera,


saborear el dulce sabor del amor,


sanar, lamiendo tus heridas que


el paso del tiempo te dejó.





Se buscan desesperados nuestros cuerpos


para fusionarse  de está pasión,


me 
embriaga el jugo de tu boca,


¡Que dulce sabor!


Que penetra y recorre mi ser


haciéndome perder la cabeza,


¡Que magnifica sensación!





Traspasando las barreras del tiempo


de la locura y la razón.





Ana G

domingo, 5 de diciembre de 2010

Felina



























Gracias
Dani, por este bello poema, me encanta, ya que seguro que en mi otra vida  fui felina,
jajajajja. Adoro a los gatos.







SONETO II





Andando
mi camino yo me pierdo


pues
al  pensar yo, noche y día en mi amada,


otro
bien que su cara no recuerdo


sintiendola
en mi cuerpo derramada.





Si este
dolor deseo, ¿que merezco?


seguro
se que pierdo por amarla


hasta
mi fe, por esto que padezco,


y sin
voz necesito yo, llamarla.





En
negras noches  he andado sin luna,


rojas
tardes de fuego he recorrido


ya
ves,  y tu no estabas en ninguna.








Aráñame
si quieres mi gatuna,


mas ya
no me atormentes el sentido


que
vida sin ti… no veo ninguna.








Shiro Dani







lunes, 29 de noviembre de 2010

Esperaré















Esperara
mi piel firme y morena


tus
caricias.


Mi sed
de tu boca persiste.


Mis ojos
ciegos por tu ausencia


no
descansaran, no verán la luz


hasta
que por cansancio entre tus brazos


quede
dormida.





¿Será
verdad que allí


donde
nuestras almas se despojen


de lazos
terrenales,


donde
nuestros seres se conviertan





en pura
esencia,


donde el
tiempo no sea,


donde
las gentes no sean gentes


podamos
ser felices?


¿Será
verdad mi vida?,


¿Será?

jueves, 25 de noviembre de 2010

Sin escrúpulos









Este
poema que hoy honra mi bloc, está dedicado a todas las mujeres que mueren a
manos de los sin conciencia, sin sentimientos, vacíos y sin escrúpulos. Al menor
indicio déjalo. 


Cita de Ana Giner.


"Hay
hombres que suspiran por ti, hay hombres que morirían por ti, hay hombres que jamás
te arrebatarían la vida, sino que la darían por ti tú,te
mereces ese hombre"





 Sin escrúpulos.









Sin
conciencia me matas,


olvidándote
de toda,


racionalización
y cordura. 





Tendrás
en tú conciencia


con
todos los amaneceres


de tu
existencia, el amargo


remordimiento
de tú macabro


crimen.





Entre
rejas tendrás tiempo de


pensar y
Dios quiera, de tú


arrepentimiento.





Porque
me has arrebatado


sin
ningún escrúpulo la vida,


con
premeditación y alevosía.







Poema
del libro  “Mirada de mujer”


Ana
Giner